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Cuando era pequeño y llegaban estas fechas (dependiendo de la evolución de las temperaturas del año, pero siempre al caer septiembre), recuerdo que en casa siempre había una pequeña revolución, con la sustitución de los trajes de baño, camisetas o bermudas por la ropa de otoño… Y a la inversa ocurría cuando se acercaba el fin de curso y comenzaban las primeras subidas de temperatura.
Y es que es de sentido común, de eso que la sabiduría popular es líder indiscutible: cuando abres el armario en pleno agosto para vestirte y hacer algún plan veraniego, ¿cómo vas a tener el espacio ocupado por jerseys o ropa de abrigo? ¿podrás encontrar algo?

Desafortunadamente, en nuestra querida geografía española, son muchas las farmacias en las que estos procesos de renovación estacional, “misteriosamente”, no se producen.
Estoy seguro de que si estás leyendo esto no es tu caso, pero…¿no chirría entrar en una farmacia en Jerez en Agosto, con “la caló” que hace, y encontrarse tras el mostrador una estupenda colección de “frenadoles”? Que pasa, ¿que en Cádiz la gente demanda mucho esos productos en estas fechas? Lo mismo pasa cuando encuentras un lineal, en el mejor sitio posible de una farmacia de Madrid (por repartir responsabilidades…), en pleno noviembre, una importante serie de “packs” anticelulíticos…y podríamos seguir con otros ejemplos.
Bromas aparte, vayamos a lo práctico. Una serie de operaciones anuales de “cambios estacionales” dentro de una farmacia son obligatorias. No sólo pueden incrementar las ventas, que es importante, sino COMUNICAR a los clientes que estamos “al día”, que tenemos bien afiladas las herramientas del Consejo, que procuramos lo mejor y lo más actualizado para ellos: transmitimos confianza.
Y esto tan sencillo ¿por qué no se hace? No se trata de superponer un cartel más grande de la última campaña de un reconocido laboratorio para que tape la anterior…es una operación de sustitución. Y, si, en el almacén siempre hay hueco.

Infórmate y aprende, sólo se trata de un pequeño esfuerzo que luego adoptarás como hábito.

(Referencia imagen elmueble.com)